Por La Berenjena
CDMX.- La oleada de sismos que ha sacudido al país en los últimos meses ha provocado que miles de mexicanos modifiquen sus costumbres y, como es el caso de Claudia Tovar, recorten sus periodos habituales de sueño.
“Generalmente dormía desnuda o con una simple playera encima”, señaló la diseñadora de 24 años de edad, “pero aprendí a no hacerlo después de las malas experiencias que he tenido cuando la alerta sísmica suena en las noches”.
La habitante de la Delegación Benito Juárez relató que durante el sismo registrado el pasado 19 de febrero, salió corriendo de su departamento sin percatarse de que sólo portaba una playera tan chica, que ni estirándola alcanzaba a cubrir sus pudendas.
“Me di cuenta a media escalera y, cuando hice el intento por regresar, los vecinos que venían bajando me obligaron a continuar hacia la salida”, recordó.
Para su fortuna, cuando Claudia ya estaba en el camellón de Avenida Universidad, tratando infructuosamente de cubrir su curvilínea figura, Antonio Dávalos, su vecino, se aproximó a ella para prestarle su bata.
La caballerosidad de Antonio le hizo ganar la simpatía de Claudia pero también el desprecio de los demás vecinos varones quienes, deleitados, observaban a la joven.
Tras la experiencia, Claudia dedica ahora al menos 90 minutos a decidir la ropa de cama que usará cada noche y está aprendiendo a dormir con tenis.
Actualización: La asociación de condóminos del edificio habitado por Claudia convocó a una junta en la que se decidirá si Antonio Dávalos puede seguir habitando el inmueble.
Vegetal Político 