Culiacán.- El festejo para celebrar el centenario de Don Dionisio Sánchez dio un giro inesperado cuando, al tomar la palabra, el anciano admitió que nunca deseó tener hijos.
“Yo solo quería acostarme con Estela”, dijo Don Dionisio recordando el inicio de su relación con Estela I, la hoy difunta bisabuela, “pero la estúpida se embarazó y tuvimos que casarnos y tener más hijos… ya qué”.
La noticia sorprendió a sus hijos Dionisio II, Estela, Marco y Adrián; a sus nietos Dionisio III, Sergio, Perla, Rodrigo, Saúl, Giovanna, Carlos y Damián; así como a sus bisnietos, Dionisio IV, Perla II, Estela II, Marco II, Adrián II, Giovanna II, Carlos II, Damián II y Brayan I, quienes de golpe, cobraron conciencia de que toda su existencia se debía a un error de cálculo de su bisabuela.
Tras la revelación de Don Dionisio, la cordialidad de la reunión familiar desapareció dando paso al drama.
“¡Maldito seas!”, gritó Estela I, “¿cómo te atreves a decirnos eso?”
“¡Te odio, te odio, te odio, siempre te he odiado!”, exclamó Dionisio II.
Al principio, Marco, tercer hijo de Don Dionisio, guardó silencio como si la noticia no lo hubiera afectado, pero estalló en furia cuando su nieto Brayan I, le gritó al oído lo que su padre había declarado.
“¡Este auxiliar auditivo es una cochinada!”, exclamó Marco mientras se arrancaba el aparato para la sordera de su oreja izquierda y lo lanzaba lo más lejos posible*.
Giovanna se levantó de la mesa, arrojó su plato al suelo y se retiró del lugar sollozando acompañada de su esposo Ricardo y sus hijas Giovanna II y Estela II.
Dionisio III tomó el pastel y lo estrelló contra la pared gritando frases indescifrables.
“Precisamente por eso no quería tener hijos”, musitó Don Dionisio mientras contemplaba la escena.
*47 centímetros.
Por La Berenjena