La personalidad de los candidatos a través de sus firmas

CDMX.- Apoyados por expertos grafólogos, realizamos un minucioso análisis de la forma y características de las firmas de los candidatos que contienden por la presidencia de México en las próximas elecciones.

Nota: Durante la realización de este artículo descubrimos que los rasgos de personalidad que los candidatos expresan en sus firmas pueden variar dependiendo del papel sobre el cual fueron realizadas.

Andrés Manuel López Obrador

Realizada sobre un pedazo de cartón, la firma del candidato de Morena deja ver que su autor tiene serios problemas mentales que le impedirían ejercer el cargo al cual aspira y que le habría gustado ser cubano o venezolano. Los trazos hacen suponer que ha cometido múltiples homicidios por los cuales no ha sido culpado ya que ha logrado desaparecer los cadáveres y también revelan que posiblemente come carne humana, prefiriendo la de bebés de menos de 6 meses de nacidos.

Ricardo Anaya

Además de fea, la firma que el candidato realizó sobre una servilleta es prueba suficiente de que miente constantemente, que simpatiza con las ideas de Adolfo Hitler, que a pesar de estar en casa nunca le abre a los niños que piden dulces en Halloween, que si tuviera oportunidad le pegaría a Dios y que considera que El Padrino 3 es la mejor película de la trilogía.

Margarita Zavala

La firma que realizó la candidata sobre papel de estraza demuestra que disfruta torturando a pequeños roedores, que ha sacrificado a decenas de jóvenes doncellas para bañarse con su sangre, que al manejar no usa las direccionales y que, sin importar que haya gente esperando, siempre tarda demasiado tiempo en decidir qué pedirle al barista del Starbucks.

José Antonio Meade

La espléndida firma que el generoso candidato realizó en un cheque por un millón de pesos a favor del autor de esta nota denota que es un genio, que es la mejor opción para los mexicanos, que es alegre, que es decidido, que es indudablemente apuesto, que es infalible, que es heroico, que es un estadista con lugar reservado en el firmamento de las grandes figuras políticas de la historia y que, como si todo lo anterior no fuera suficiente, es un tigre en la cama.

Por El Chayote