Valientemente, Barbara Bush se aferra a la muerte

Houston.- Los médicos que atendieron a Barbara Bush, ex Primera Dama de los Estados Unidos y esposa del ex presidente George H. W. Bush, confirmaron a los medios que la mujer de 92 años continúa aferrándose valientemente a la muerte mientras permanece sepultada en terrenos de la biblioteca y museo George H. Bush de la Universidad de Texas.

La madre del también ex presidente George W. Bush había batallado con problemas de salud durante los últimos años y fue declarada clínicamente muerta la noche del 17 de abril del presente año pues, en un inspirador despliegue de dignidad y coraje, decidió renunciar a toda clase de tratamiento médico, lo que le permitió permanecer en calidad de occisa.

“Es sorprendente lo que la voluntad humana puede lograr en momentos así”, señaló el Dr. William Abernathy III, médico familiar de los Bush, “uno pensaría en la inevitabilidad de ser capaces de mantener a alguien con vida, pero es claro que la ciencia médica tiene aún mucho que aprender de los deseos de una persona ante la perspectiva de la muerte”, añadió.

Abernathy confirmó que el hogar de la ex pareja presidencial contaba con los más sofisticados equipamientos para prevenir el deceso de un paciente, tales como defibriladores, pulmones artificiales, cámaras hiperbáricas y hasta inyecciones de adrenalina, sin embargo, recalcó, nada de ello puede hacer frente con eficacia a la negativa de tratamiento que Barbara Bush solicitara hace meses, misma que le ha permitido mantenerse muerta.

El médico concluyó la entrevista recordando que pacientes con padecimientos similares a los de la señora Bush a veces logran extender sus vidas tres o cuatro años más allá de los pronósticos más alentadores, pero que ella había optado por hacerle frente a dichos males con una lucha breve y finalmente ineficaz, quizá inspirada en la Operación Tormenta del Desierto que su hoy viudo encabezó durante la Guerra del Golfo de 1990.

“Resulta complicado ser un hombre de ciencia y no admitir que estamos presenciando algo que podría describirse como un milagro”, señaló el galeno, “pero supongo que hay misterios que mi profesión aún no logra develar”.

Los rumores recientes de que Barbara Bush seguía viva fueron negados por Lakwanda Johnson, supervisora de enfermeras, quien dijo que la información se generó cuando uno de los camilleros a cargo de la remoción del cuerpo no aseguró debidamente el brazo de la fallecida al transportarla a la agencia funeraria y éste se balanceaba cual péndulo al avanzar.

“Esa mujer siempre mostró determinación y temple”, mencionó Johnson con la voz
entrecortada por las lágrimas, “no había poder humano capaz de hacerle renunciar a la muerte”.

Por El Salsifí